DIARIO
DE UN PARADO
Otro día mas me despierto sumido en el
aturdimiento, ¿ Sera lunes,martes...? Después de recapacitar unos
segundos caigo en la cuenta que es lunes, pero al al fin y al cabo me
es indiferente. Son las 9 de la mañana, lo primero que hago es
sacudir los vaqueros con la esperanza de oír un traqueteo de
monedas; ¡ bien!, puedo tomarme un café, fumar un cigarro, leer el
periódico y pasar un rato con algún amigo. Es el único momento del
día que no estoy asqueado, hasta que abro el diario y veo la foto
del hijo puta de rajoy, luego el marca....¡dios que asco de
país!.... la indiferencia me embarga, indiferencia por la política,
por el fútbol, por todo...Me avergüenza ser español, un país al
que se le da mas importancia a ganar un mundial que a los 6 millones
de parados,un país azotado por huracanes de corrupción día tras
día, y no pasa nada...Un país de pandereta...Pero bueno por lo
menos el café del parado es igual que el del adinerado, creo...hasta
ahí podríamos llegar...
Miro el reloj de nuevo, son las 11 de
la mañana, ¿ que puedo hacer ? Varias ideas me recorren la cabeza,
una vuelta en bici, un paseo por el monte, un videojuego...Lo de
buscar trabajo hace tiempo que lo he desechado, ¿para que? Gastar
dinero que no tengo en gasolina, para mi se ha convertido en una
utopía, en este país sin padrino no tienes trabajo, y encima se
jactan de ello ¡viva la democracia! Que nos hace iguales a todos, a
todos los primos, hermanos y demás familia del político claro...
Decido ir hasta el monte a respirar
aire puro, fumarme un poco de maría y buscar alguna seta,
reconciliarme con el silencio y la soledad. La soledad puede ser
cruel,pero a mi me satisface,me gusta sentarme y escuchar el sonido
del viento agitando las ramas de los pinos, el canto de los
pájaros,el silencio...,me relaja y me hace olvidar por un momento el
país en que vivo.
Llega la hora de la comida,y después
la angustia del tiempo muerto, de ver pasar las horas vespertinas
lentamente sin saber que hacer, encender el ordenador y mirar las
escasas ofertas de trabajo que no son para mi,luego ir a la huerta y
observar embobado el lento crecimiento de las plantas mientras me
obsesiono por el paso del tiempo, por el desaprovechamiento de una
vida que yo no he elegido vivir,pero intento no caer en la rutina de
los sentimientos y la depresión.
En este país cada vez es mas difícil
sonreír pero yo lo intento, se me da bien camuflar mis
sentimientos,no merece la pena vivir en la amargura ni mendigar
cariño, mejor una sonrisa cínica que un llanto sincero. A veces
pienso que en este país la hipocresía y el cinismo se aprenden en
las escuelas y se propagan en la sociedad como una plaga , si dices
lo que piensas estas jodido, mejor decir lo que quieren oír, y te
das cuenta que no eres mas que un borrego en un rebaño donde los
pastores son necios, magos del engaño y maestros del timo, y si
decides salir del rebaño te conviertes en un apestado que va en
contra de los valores éticos, pero estos...¿ que sabrán de ética?.
Siguen pasando las horas, muertas,
insulsas, llegando al ocaso de otro día más y se me ocurre escribir
un pequeño diario,no para que lo lean los demás sino para sentirme
mejor conmigo mismo.
Mostrar mi rabia atrapada en una rutina
maldita consagrada a la fortuna, en la incomprensión de una sociedad
azorada,aturdida por los golpes de la cicatería de aquellos que se
enorgullecen de sacar brillo a su ego;una sociedad enferma,
En fin, es el país en el que me ha
tocado vivir, los hay peores, sin duda, pero si pudiera elegir no
escogería este,a pesar de ser campeones del mundo.
Comparto tu sentimiento, pero intenta no caer en el abismo de la desesperación, te arrastrará como la lata que cuelga en el parachoques trasero de los coches de recien casados en las pelis americanas.
ResponderEliminarÁnimo aunque sea duro rodeados de garbanceros afincados en algún lugar de la historia que parece haber levantado la cabeza .
Un saludo y mucha fuerza.